Un mundo sin privacidad
Me gusta la fotografía, de hecho es uno de mis hobbies preferidos, y Facebook lo sabe, aún cuando lo único relacionado con mi hobby que he hecho en la red social es subir una que otra foto que he tomado en algún lugar interesante. Sin embargo, cada vez que entro a Facebook, veo desplegado en mi página media docena de anuncios invitándome a que tome algún curso de fotografía o que compre un nuevo lente que ha salido al mercado.
Lo mismo sucede en decenas de sitios de Internet que entro. Todos parecen saber el lugar donde vivo (al menos la ciudad) y despliegan anuncios relevantes de compañías localizadas en mi ciudad. Amazon es aún peor. Apenas entro en sus páginas comienza a recomendarme libros o artículos basados en mi historial de compras. La realidad es que vivimos en un mundo donde la privacidad ha dejado de existir. Cada sitio de Internet que visitamos nos rastrea, monitoreando lo que compramos, lo que hablamos, y hasta lo que buscamos en la red.
Si tenemos un celular, sin duda la compañía que provee los servicios móviles mantiene un record exhaustivo no solo de tus llamadas, sino de los mensajes de textos que envías, las aplicaciones que usas en tus teléfonos inteligentes, y los sitios de Internet que visitas usando tu móvil. Si usas un lector de libros digitales, como el Kindle, cada vez que marcas una página del libro Amazon guarda esta información en sus servidores para luego analizarla y determinar cuando terminaste de leer el libro para poder recomendar otro y continuar el mismo ciclo.
Las tarjetas de descuentos también llamadas “tarjetas de lealtad” no son más que un gran centro de datos que guarda tus hábitos de compra. Y ni para que hablar de esos juegos de Facebook que recogen no solo tu información privada, sino la de tus amigos.
El anonimato y la privacidad en el siglo XXI se han convertido en una ilusión, y no hay que ser paranoico para asumir que en cualquier momento del día alguien sabe exactamente lo que estamos haciendo. Y lo peor es que al menos que estemos dispuestos a vivir en una montaña solitaria o en el medio de la más remota selva, no hay forma de escapar de esta constante vigilancia.
Send to Kindle
Trackbacks/Pingbacks
Información Bitacoras.com…
Valora en Bitacoras.com: Me gusta la fotografía, de hecho es uno de mis hobbies preferidos, y Facebook lo sabe, aún cuando lo único relacionado con mi hobby que he hecho en la red social es subir una que otra foto que he tomado en algún lugar int……